sábado, 14 de febrero de 2015

Cómo escribir un libro sin morir en el intento #1

¡Hola, hola, hola! ¿Qué tal? Por fin se ha acabado la semana y con ella los exámenes, trabajos y todo lo demás. De modo que he decidido aprovechar un poco estos días de puente para traeros algo que me llevaba rondando por la cabeza bastante tiempo, y es que... Ya que al fin y al cabo este es (por lo general) un blog para lectores he pensado que... ¿por qué no hacer algo también dedicado a los escritores? Así que nació la idea de... ¡Cómo escribir un libro sin morir en el intento!

Al principio mi idea era hacer una sola entrada dedicada a esto, pero cuando me puse a escribirla me di cuenta de que todo lo que quería decir no cabía en tan poco espacio. De modo que he inaugurado una nueva sección en la que (Desde mi limitada experiencia) os daré consejos y cosillas útiles para aquellos que esteis pensando en poneros a escribir un libro o una historia más o menos larga. 


En esta primera entrega empezaré desde cero, de modo que de lo que os quiero hablar hoy es de...



LAS IDEAS



Si te gusta mucho leer, es prácticamente imposible que no te pique el gusanillo de escribir. No tengo muy claro por qué ocurre esto, pero todos mis amigos lectores (incluso los más vagos, y me incluyo...) han caído en la tentación de ponerse a crear sus propias historias tarde o temprano. Esto es genial, y en principio no se necesita un gran conocimiento para ponerse a ello. Pero si eres una persona tenaz y te has propuesto la meta de escribir un libro en serio, tienes que saber por dónde empezar:

¿Lógico, no? Si quieres escribir un libro, lo primero que necesitas tener antes que nada, es una idea. A ser posible, una buena idea. ¿De dónde puedes sacarla? Esta primera parte es lo más fácil, porque las ideas están en cualquier lugar. La inspiración puede sacarse de la música, de algún sueño, del comentario de algún amigo... En definitiva, de todas partes. Puede que al principio, si no estás acostumbrado a buscarlas, te cueste dar con una de ellas. Pero créeme, en cuanto lleves un tiempecillo escribiendo tendrás que apartarte las ideas de la mente como si fuesen moscas. 

Algo que ayuda mucho al principio del todo es la lluvia de ideas. Coge papel y bolígrafo y haz una lista random de cosas al azar. Puede tratarse de lo que tú quieras (lugares, sensaciones, situaciones, personajes...) Tu lista ni siquiera tiene que tener ningún sentido, de modo que no te lo pienses mucho. Cuando termines, léela con calma y tranquilamente. Quizá no todo lo que has escrito te sirva para hilar tu historia, pero seguro que muchas de las opciones te dicen algo. Entonces ponte a pensar... ¿Qué te dicen? 

Si a pesar de esto sigues sin dar  con tu buena idea, ¡no desesperes! Deja que pase un poco de tiempo, y tampoco te fuerces a pensar día y noche en ello. Lleva siempre algo con lo que escribir a mano, Al igual que la inspiración suele desaparecer sin avisarnos, puede pasar al contrario. Puedes estar en clase, en el autobús o en medio de la boda de tu tía cuando de repente... ¡DING! Se te enciende la bombillita y ahí está tu esperada idea. De modo que da igual lo que sea, una libreta, una servilleta, tu propia mano, una nota del móvil... Cualquier cosa sirve con tal de atrapar nuestra idea. ¡Pero apuntadla cuanto antes! Si no (aunque parezca una tontería y os de la sensación de que no pasa) es posible que se os acabe olvidando. Y creedme, no hay nada más frustrante que tener una brillante idea y olvidarla >.<

No todas las ideas (ni mucho menos) van a poder desarrollarse lo suficiente como para convertirse en tu libro. Pero siempre habrá una entre todas ellas en la que te tome más tiempo pensar. Cuando ya tengas tu buena idea, puede que aun sepas que la tienes. El único modo de ello es darle vueltas y más vueltas. Llegará un momento, después de que te ronde por la cabeza durante días o incluso semanas, en el que esa idea se vuelva lo suficientemente precisa, original e imposible de ignorar. Entonces es cuando debes atraparla definitivamente y ponerte a trabajar con ella. 

Nota importante: Aunque ya hayas elegido una idea para tu obra, ¡no olvides las demás! Porque... ¿quién sabe? Si bien esas pequeñas ideas no alcanzan para una historia completa, a lo mejor pueden resultarte útiles a lo largo de tu novela, en algún aspecto secundario. Estos siempre aportan personalidad y dimensión a la trama. De modo que, de vez en cuando, echa un vistazo a lo que tienes apuntado en tu libreta-servilleta-nota del móvil. A lo mejor veas con otra perspectiva lo que al principio no creías bueno o muy útil.


¡Y esto ha sido todo por la primera entrada de la sección! Espero que os haya sido útil o que, por lo menos, os haya entretenido un rato. Intentaré subir las nuevas entregas cada semana de modo que el fin de semana que viene volveré de nuevo, esta vez para hablaros de los personajes. 

¡Muchos abrazos y mucha suerte escribiendo!

4 comentarios:

  1. Geniales consejos Alba ^^ A mí la lluvia de ideas no me sirve para la trama, sólo para los personajes XD pero bueno, el caso es que funciona de una u otra manera.
    Yo creo que lo más difícil es espantar todas esas ideas que te atacan mientras escribes. Me distraen y me cuesta centrarme en una sola historia, entonces me cuesta muchísimo acabar los textos largos >.<
    Seguiré leyendo esta sección, seguro que me ayudarás bastante jajaja
    Un besoo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pues a mí la lluvia de ideas me resulta útil... Aunque claro, también cabe decir que encuentro las clases de matemáticas y otras cosas por el estilo inspiradoras JAJAJA.

      Puf... Si yo te contara la cantidad de words abiertos que tengo en el ordenador no me creerías. Tengo una carpeta llamada ''vertedero de ideas'', y solo ahí tengo más de cuarenta documentos >.< En fin, que te entiendo...

      ¡Muchos besos! :3

      Eliminar
  2. Ha a mi tampoco me ayuda la lluvia de ideas, y es curioso, porque a muchos de mis amigos escritores les funciona, pero tienes razón, todas las ideas pueden ayudarte a conseguir una historia completa. Hasta este momento sólo he escrito de novelas serias, la primera es Cronux (la de mi blog) y la segunda no la público y no tiene nada que ver con el tema de Cronux. Porque como ya he comprobado y como tu dices, la inspiración te llega de la nada y en el momento menos inesperado. Hahaha, besos, voy a seguir leyendo esta sección.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola! Yo llevo bastante tiempo haciendo un intento de libro serio. Se llama La Generación del Milenio y hay por ahí un link para leerlo... Pero claro, como en los primeros capítulos apenas había empezado a escribir son un poco desastre >.< ¡Tengo que pasarme por tu blog a leer la tuya! Ya me llamó la atención cuando entré por primera vez, de modo que a ver cunando saco tiempo :)

      ¡Besos y hasta pronto!

      Eliminar